Llegamos a los puntos más distantes de Macará, llevando un mensaje de salud y esperanza para nuestras comunidades. Esta vez nuestro trabajo se trasladó a los barrios: Pindal de Jujal y Linderos, en donde se realizaron jornadas médicas en terapia, psico-rehabilitación, dirigido a los adultos mayores con discapacidad y sin discapacidad, de estos barrios.

Rostros de alegría, y agradecimiento se reflejaron en sus miradas de quienes con vocación y cariño atendieron la salud de nuestra gente.

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